A lo largo del río,
por el olor fiel de la
arboleda,
hasta el valle,
caía una lluvia fina ,
consoladora y muda,
de agua conocida ,
sobre el paso lento,
armónico,
del cortejo… fúnebre.
Nadie giraba la cabeza,
ni miraba a lo alto,
sobre todo él,
todavía con el pavor de
Orto (1)
Era la única persona,
que llevaba una cartera.
Al final, la viuda,
le pidió que la abriera,
Y luego… Sonrió.
Había cesado la lluvia.
Olía a tierra viva,
y recordada .
(1) Orco , monstruo o
brutal masa negra , que arrebata el
ultimo suspiro, a nuestros seres mas queridos, dejándolos inertes , y
ascendiendo a un gigantesco agujero negro , en la luz, desde donde quizás nos observe
todavía temblando , desgarrados , en un silencio implacable .
“La cartera vacía desde
entonces “
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